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REFLEXIONES DE ADVIENTO Y DE LA ÉPOCA NAVIDEÑA
Por Milo y Connie Thornberry
INTRODUCCIÓN:
Acaso de la misma forma en que nos alistamos para la Navidad, encontramos tiempo para prepararnos para la venida de Jesús? Cada Navidad nosotros (as) como cristianos somos llamados (as) a recordar las raíces de nuestra fe.
Es difícil encontrar sentido y gozo en medio del consumismo navideño, pero hay algunas cosas que podemos hacer. Apartando tiempo para reflexionar y adorar juntos (as) podemos preparar nuestros corazones para la venida de Jesús.
Las reuniones semanales aquí provistas, tienen el fin de ofrecer a individuos, familias y otros grupos pequeños, una forma de recordar la razón por la que celebramos esta época santa. Las reuniones empiezan la primer semana de Adviento y continúan hasta el Banquete de Epifanía.
Antes que dé inicio el Adviento, deberá hacer una Corona de Adviento. Busque un libro con indicaciones para hacer una Corona de Adviento o siga estas sencillas instrucciones: Tome un plato largo y poco profundo (por lo menos 9 cms. de diámetro) y rellénelo con arena o con sal. Coloque 4 velas moradas alrededor de la orilla del plato. Ponga una candela blanca y larga en el centro. Coloque bien las velas dentro de la arena o de la sal, para que puedan sostenerse bien en su lugar. Haga un círculo de ramas verdes y colóquelas alrededor del plato.
También necesitará un escenario de un pesebre, fósforos y una Biblia para el servicio de adoración. Dependiendo de las edades de las personas en su grupo, los adultos probablemente querrán leer la reflexión bíblica primero. Aparte un tiempo todas las semanas para poder realizar este servicio de adoración, tal vez antes de cenar los domingos o cualquier otro día de la semana. Invite a aquéllos (as) que están solos (as).
Reúnanse alrededor de la Corona de Adviento. Tome turnos para leer, encender las velas y para orar. Tal vez quiera estudiar el servicio de antemano para adaptar el contenido a las necesidades de su grupo.
Los servicios están diseñados para preceder eventos durante la época. Planeé de antemano y seleccione las fechas para cada servicio.
Las reflexiones pueden utilizarse como parte del servicio o en forma separada
LA HISTORIA DE NAVIDAD
Mateo 2:1-12
Habiendo nacido Jesús en Belén de Judá, durante el reinado de Herodes, vinieron unos Magos de Oriente a Jerusalén y preguntaron: "¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto su estrella en Oriente y venimos a adorarlo."
Herodes y todo Jerusalén quedaron muy intranquilos por la noticia.
Reunió a todos los sacerdotes principales y a los maestros de la Ley para preguntarles dónde debía nacer el Cristo.
Ellos le contestaron que en Belén de Judá ya que así lo anunció el profeta que escribió:
Belén en la tierra de Judá, tú no eres el más pequeño entre los principales pueblos de Judá porque de ti saldrá un jefe, el pastor de mi pueblo, Israel.
Herodes, entonces llamó privadamente a los magos para saber la fecha exacta en que se les había aparecido la estrella.
Encaminándolos a Belén les dijo: "vayan y averigüen bien lo que se refiere a este niño. Cuando
lo hayan encontrado avísenme para ir yo también a adorarlo."
Después de esta entrevista, los magos prosiguieron su camino. La estrella que habían visto en Oriente iba delante de ellos, hasta que se paró sobre el lugar en que estaba el niño.
Al ver la estrella se alegraron mucho, y habiendo entrado en la casa, hallaron al niño que estaba con María, su madre.
Se postraron para adorarlo y abriendo sus cofres, le ofrecieron regalos: oro, incienso y mirra.
Luego regresaron a su país por otro camino, porque se les avisó en sueños que no volvieran donde Herodes.
LUCAS 2: 1-14
En esos días, el emperador dictó una ley que ordenaba hacer un censo en todo el impero.
Este primer censo se hizo cuando Quirino era gobernador de
a Siria.
Todos iban a inscribirse a sus respectivas ciudades.
También José, como era descendiente de David, salió de la ciudad de Nazaret de Galilea y subió a Judea, a la ciudad de David, llamada Belén, para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.
Cuando estaban en Belén, le llegó el día en que debía tener su hijo.
Y dio a luz su primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en una pesebrera, porque no había lugar para ellos en la sala común.
En la región había pastores que vivían en el campo y que por la noche se turnaban para cuidar sus rebaños.
El ángel del Señor se les apareció y los rodeó de claridad la Gloria del Señor y fueron presa del temor.
Pero el ángel les dijo: "No teman, porque yo vengo a comunicarles una buena nueva que será motivo de mucha alegría para todo el pueblo. Hoy ha nacido para ustedes en la ciudad de David un Salvador que es Cristo Señor.
En esto lo reconocerán: hallarán a un niño recién nacido, envuelto en pañales y acostado en una pesebrera."
De pronto una multitud de seres celestiales aparecieron en torno al ángel y cantaban a Dios:
"Gloria a Dios en lo más alto del cielo, y en la tierra, gracia y paz a los hombres."
DIEZ CONSEJOS PARA UNA NAVIDAD MAS SENCILLA, PERO CON MAS SIGNIFICADO
(Coloque esta tabla de consejos en el tablero de anuncios, en el refrigerador y compártala con amigos (as) y familiares.
1. Planear con anticipación. Realice una junta familiar para decidir qué es lo que el grupo verdaderamente quiere hacer y quién va hacer cada cosa.
2. Simbología. Si necesita algo que simbolice el acto de dar (además de Jesús y los Reyes Magos), infórmese sobre San Nicolás. Santa Claus ha sido totalmente acaparado por el consumismo.
3. Evite las deudas. Rehuse ser presionado(a) por la publicidad para sobre pasarse en sus gastos.
4. Evite el estress. Dese un regalo a usted mismo(a). No asuma que las cosas tienen que ser como siempre han sido.
5. Organice un intercambio, de modo que cada miembro de la familia reciba un solo regalo. Fije un límite de dinero para gastar. Regale a los niños (as) UN regalo que realmente quieran, en lugar de dar tantas cosas. Si fuera necesario, realice un fondo común.
6. Regalé algo que a la otra persona le sea necesario y no lo que usted quiera comprar, conociendo los gustos y las necesidades de la persona que lo va a recibir.
7. Haga regalos alternativos.
Compre artesanías y ropa de países en desarrollo, en mercados alternativos y no de importadores comerciales, para que de este modo los artesanos reciban un precio justo por su trabajo. Dé el 25% de lo que gastó el año pasado a personas necesitadas, personas individuales o grupos del vecindario, nacionales o internacionales. Regale un poco de su tiempo, no solamente "cosas" - un libro de cupones para futuros servicios- (por ejemplo, cuidar a los niños para que los padres puedan disfrutar de una noche libre; comprométase a realizar tareas del hogar, tales como: lavar los platos, cortar la grama, etc.) o algo que usted haya horneado, cocido o hecho a mano.
8. Celebre el Adviento durante cuatro semanas antes de Navidad.
9. Ponga los regalos bajo el árbol poco tiempo antes de abrirlo. Luego tome turnos para abrir los regalos, de modo que cada regalo pueda ser apreciado y agradecido.
10. Haga cambios lentamente, pero persistentemente. No intente cambiar todo y a todos (as) de una vez. La resistencia puede hacerle sentir derrotado (a) y solitario (a).
REFLEXIONES
30 de noviembre 1997
Primer domingo de Adviento
Jeremías 33: 14-16
Lucas 21:25-36
¡ Dios viene !
¡Ayer, hoy y mañana!
Siempre existe cierta tensión entre fe y cultura. En nuestra sociedad esta tensiones son mucho más notoria en la celebración de Navidad.
Hace algunos años cuando Alternatives filmaba el vide de "Have Yourself a Merry Little Christmas" (Pase una muy Feliz Navidad), los productores realizaban una filmación en vivió en una escuela dominical de niños (as) de 5 años. Estaban hablando acerca de la Navidad y uno de ellos dijo "En la época Navideña nos gusta mucho cantar". Uno de los cantos que nos gusta es ´Santa Claus ama a los niños, a todos los niños del mundo, rojos, amarillos, negros y blancos, todos son preciosos en su presencia. Santa a ama a los niños del mundo.´"
Esta percepción tan inocente es un serio recordatorio de la mezcla que existe entre fe y cultura, la cual ha causado confusión y ha llevado a muchas personas de fe a preocuparse un poco más acerca de la forma en que es celebrada la Navidad en nuestra sociedad.
La tensión entre fe y cultura ha estado presente desde un principio. En el Siglo IV la fiesta de Mithras, el dios sol, se realizaba el 25 de diciembre. También era el último día de Saturnalia, un antiguo festival romano, en el que se conmemoraba la época de oro de Saturno.
La Navidad se estableció en esta fecha para poder darle a las y los cristianos (as) una alternativa para celebrar. Hay indicios que indican que al inicio del siglo V los cristianos se preocuparon profundamente por la forma en que estos festivales influenciaban o afectaban la forma de ver la Navidad.
Los textos bíblicos para el primero domingo de Adviento apuntan hacia una dirección diferente a la de nuestra prácticas culturales. Estos textos nos dicen "Dios está en camino, prepárense." Debemos prepararnos para la venida de Dios, no para la venida de Santa Claus. En el primer domingo de Adviento las escrituras nos animan a ver hacia el pasado y al futuro. Nos hacen recordar la esperanza por la venida del Mesías. En los días oscuros, antes de la destrucción de Jerusalén por los Babilonios, el profeta Jeremías, vio más allá de la destrucción, vio la venida de "un renuevo de justicia, de donde brotará la vida".
En un tiempo de confusión y caos el profeta tiene su vista puesta en la venida de uno que vendrá a "establecer justicia y honradez en la tierra".
Los textos del evangelio para el primer domingo de Adviento señalan hacia el final de la historia cuando Dios vendrá de nuevo a completar lo que ya había iniciado en Cristo.
La amonestación es "Estar alerta para que sus corazones no se carguen con disipación y embriaguez ni con los preocupaciones de esta vida..."
Dios vino en nuestro pasado. Dios es nuestro presente. Dios vendrá en nuestro futuro. Dios es amor, enviado a nosotros (as) en Jesús y Jesús es quien "ama a los niños (as), todos los niños (as) del mundo."
5 de diciembre de 1997
Segundo domingo de Adviento
Malaquías 3:1-4
Lucas 3:1-6
Dios Viene, como fuego purificador!
A través de los tiempos la venida del Señor ha sido anunciado por mensajeros. El profeta Malaquías anunció un tiempo en el cual vendría un mensajero a preparar la venida de Dios. Juan el Bautista fue identificado por los escritores de los Evangelios como el anunciado por el profeta Malaquías, como la voz que clama en el desierto para preparar el camino del Señor. La voz y el llanto vienen a nosotros (as) en la época de Adviento. ¿Cómo preparar el camino para la venida de Dios?
Adviento es un tiempo reservado para la preparación. En el siglo IV, siglo en el cual el calendario cristiano tomó su forma básica, fue el inicio de una nueva era para la iglesia cristiana. Por más de trescientos años la iglesia cristiana había sido perseguida por las autoridades romanas. Esta persecución finalizó en el año 311 con la Ley de Tolerancia,
cuando el Emperador Constantino I convirtió a la iglesia perseguida en la iglesia tolerada, y tiempo más tarde en la iglesia favorecida. En un período de cien años la cantidad de cristianos confesos aumentó dramáticamente. Tribus completas, de la noche a la mañana se convertían al cristianismo cuando sus líderes decidían que era "políticamente correcto".
Mientras los líderes cristianos, por casi trescientos años, habían enfocado sus esfuerzos en la preparación de cristianos (as) para la persecución y el sufrimiento, de pronto se encuentran con el prospecto de una iglesia que está siendo invadida por personas con muy poca o sin ninguna idea de lo que era el cristianismo. Es aquí cuando los líderes se enfrentan a una tarea de proporciones gigantescas: "la educación cristiana".
Las épocas de Adviento y de Cuaresma, fueron establecidas para proporcionar la preparación necesaria para dos de las celebración mas importantes de la iglesia - Navidad y Semana Santa.
Adviento es muy importante y necesario para nosotros (as) hoy en día. Es nuestra oportunidad desde nuestra cultura para "preparar el camino" para la celebración del nacimiento de Cristo. Nos quejamos de la comercialización de la Navidad en nuestra sociedad, pero el mensaje de Malaquías a los exilados retornados en Judá, unos cuatro siglos y medio antes de Cristo, que fue el de "preparar el camino" del Señor, no se inició en la sociedad como un todo sino en la comunidad de fe. La venida de Dios, para la cual los mensajeros se prepararían, sería como "fuego consumidor", bastante contrastante con nuestra imagen de la Navidad. La preparación es algo muy serio, pero es algo lleno de esperanza. La imagen del "fuego consumidor", hecho popular en "El Mesías", de Handel, es una imagen de purificación no de destrucción ni rechazo `Ñ?
14 de diciembre de 1997
Tercer domingo de Adviento
Sofonías 3:14-20
Lucas 3:7-18
Dios viene!
Una promesa para las mujeres y los hombres abatidos.
Philip Schaff, un prominente historiador de la iglesia, del siglo diecinueve, notó que desde un principio la Iglesia tuvo que luchar contra la celebración equivocada de dos de sus "celebraciones santas".
Hubo una lucha para evitar que éstas celebraciones sucumbieran ante las celebraciones populares de los no cristianos. También hubo que luchar para evitar hacer lo que los fariseos habían hecho con los días santos de los judíos -el hacer tantos requerimientos para guardar la pureza de las celebraciones, al punto que éstas se convirtieron en cargas pesadas para las personas, una práctica -nos recuerda Schaff- que "provocó la denuncia de Cristo y los Apóstoles."
Cuando Juan "el Bautista" recordó a los oyentes que el hacha estaba al pie de los árboles, listo para cortar aquéllos que no tuvieran buenos frutos, la gente le preguntó: "¿Qué debemos hacer? Él contestó: "El que tenga dos capas dé una al que no tiene y quien tenga qué comer haga lo mismo" A los cobradores de impuestos que preguntaron, respondió: "No cobren más de lo debido". A los soldados, contestó: "No abusen de la gente...y conténtense con lo que les pagan."
¿Y nosotros (as) cómo podemos prepararnos para la Navidad sin ser arrastrados (as) por la versión comercial de la Navidad y sin añadir reglas y requerimientos que destruyen el espíritu de la Navidad?
En su pequeña historia "Where Love Is, There God is Also, (Donde hay amor, allí está Dios), Leo Tolstoy, atrapa el espíritu de la preparación para Adviento, su gozo y su poder renovador. El zapatero Martín tiene una visión, que Cristo lo visitara al día siguiente. Él prepara su casa y pone la mesa. Espera durante el día pero sólo encuentra a un anciano necesitado de calor y de una taza de té, una joven madre con su niño necesitados de alimento y de vestido y a una anciana luchando contra un niño tratando de robarse una manzana. Martín ofrece hospitalidad a cada uno. En la tarde cuando abre su Biblia para lee los Evangelios su mirada se fija en las palabras del capítulo 25 de Mateo-"Porque tuve hambre y ustedes me alimentaron, tuve sed y me dieron de beber. Pasé como forastero y ustedes me recibieron." - en este momento se dio cu`Ñ?
En medio de las luchas para mantener claro el mensaje de Adviento, ¿cuál es la promesa de Dios? El profeta Sofonías dijo: "El Señor tu Dios, está en medio de ti...Él renovará tu amor." En este tiempo de Adviento haz tuya la promesa.
21 de diciembre de 1997
Cuarto domingo de Adviento
Miqueas 5:2 5ª.
Lucas 1:47-55
Lucas 1:39-45
¡Dios viene!
¡un sí incondicional!
Cuando Dios decide hacer algo maravilloso, algo grande; los cálculos de poder humanos son irrelevantes. Pasando por alto la amenaza del poderoso impero Asirio, en el siglo VIII a.C., Miqueas anuncia un tiempo en el cual un nuevo gobernador de Israel vendrá de Belén, que era la ciudad natal del Rey David. Esto era un recordatorio de las antiguas promesas que Dios había dado a David.
Si lo que tenía Miqueas en mente era la venida de Jesús, setecientos año más tarde o la de uno que sería coronado después de haber vuelto los exilados, resulta en una interrogante muy importante pero sin respuesta. La iglesia ve en Jesús el cumplimiento de la promesa de Dios de enviar al "..que será su paz".
Es necesario prestar atención a lo que quiso decir Miqueas, pero no podemos limitar al Señor solamente a la visión del profeta. Sin importar las intenciones de Miqueas, Jesús nacería en Belén, un lugar modesto, sin ninguna suntuosidad - lo cual es una clave de la forma como Dios viene a este mundo - en el tiempo de Miqueas, de Jesús y en nuestro propio tiempo.
Dios no viene únicamente en lugares donde no lo esperamos pero escoge deliberadamente a personas que aparentan no ser adecuadas para llevar acabo su misión. María fue una de esas personas. Escuchamos el asombro en la voz de María mientras confiesa que Dios "...quiso mirar la condición humilde de su esclava".
¿Por qué María? Podríamos creer que "el cumplimiento de la promesa" hubiera sido posible a través de otras personas y en otro lugar. Quizá, con el paso de los siglos Dios había invitado a otros (as) pero fue María la primera persona en dar un "Sí incondicional".
¿Es posible que "el cumplimiento de una promesa" esté esperando nuestro "Si incondicional"?
24 de diciembre, 1997
Noche de Navidad
Isaías 9:2-7
Lucas 2:1-20
Dondequiera que esté el Mesías
La espera casi termina. Esta noche será la noche en la cual la espera de Adviento se transformará en una gozosa celebración de Navidad. Leemos nuevamente las palabras de Isaías y anunciamos su cumplimiento: "quienes caminaban en tinieblas han visto una luz" Pero no todos ven la luz o sienten ese gozo. Por cada reunión armoniosa, hay una dolorosa y solitaria al cruzar la esquina. Por cada regalo que se da hay una herida que se abre o una palabra que lastima el corazón. Por todo el gozo que hay en el mundo esta noche, también existe el dolor de un recuerdo y el pensamiento de un futuro vació.
Nosotros (as) los que contamos y celebramos la historia esta noche no debemos sorprendernos ni ignorarlo. En un principio todo era desolación. La joven María y José, confundido, seguramente sufrieron las miradas de todos. La ley de César Augusto, la cual consistía en traer a la familia a Belén, para ser inscritos y hacer que estas personas pagaran impuestos y que los soldados formaran parte de su ejército, no era una ley justa ni agradable de cumplir.
Si bien es cierto existía la maravilla de los pastores y los Reyes Magos, pero también estaba presente la hostilidad y muerte, el enojo de Herodes, la angustia de las otras madres de Belén. Algunos cantaban cantos de alabanza mientras otros quejidos de dolor.
La Navidad es una época maravillosa, ideal, llena de posibilidades de reconciliación, sanidad, generosidad y gran gozo. Cuando sientas esos regalos llegar hasta ti, deténte a pensar y reflexionar que hay muchas personas para quienes esta fecha no está llena de felicidad. Sé sensible a está necesidad y de esta forma ayudarás a mantener la esperanza en aquéllos quienes no sientan el gozo de esta noche.
Después de todo el gozo de la Navidad no consiste en que se nos quiten cargas, por lo menos no para Isaías, ni para esos reunidos en Belén alrededor del pesebre, ni para nosotros. No es cierto que donde esté el Mesías allí no ha de haber sufrimiento. Lo que sí es verdad es que donde quiera que haya sufrimiento, allí está el Mesías. De esta manera celebramos la presencia de una solidaridad divina en nuestra soledad y dolor. Fue, es y por siempre será Gozo al mundo, aun cuando duela. Esta noche encendemos las velas en la profunda obscuridad del invierno sabiendo que Dios está con nosotros por Jesús, la Luz incomparable, a quien tenemos el privilegio y la dicha de compartir.
Traducido de: Whose Birthday Is It, Anyway ? por : Sofía Fabiola Díaz, CEDEPCA
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